Sabemos que tras una larga jornada, no te apetece desmaquillarte, pero si quieres cuidar tu piel, es muy importante que lo hagas.

A parte del maquillaje, vivimos rodeados de contaminación que se adhiere a cada centímetro de nuestro rostro, y estos dos factores juntos, hacen que nuestros poros se obstruyan y no puedan respirar durante la noche, que es cuando la piel se regenera.
Esto nos conduce a la proliferación de bacterias, que van a provocar granitos y puntos negros, y más teniendo en cuenta que estamos frotando la cara contra la almohada constantemente, noche tras noche, y acumulando un montón más de suciedad que se une a toda la que ya teníamos taponando la piel.
A consecuencia de esto, el tamaño de los poros aumenta cuando están llenos de impurezas que se van haciendo fuerte dentro de ellos y los dilatan, y cuanto más ocurre esto y más obstruidos están, se producen infecciones y las temidas espinillas o super-granos aparecen.
Desmaquillando, ayudaremos también a evitar la tez apagada, las irregularidades, y a dejar la piel perfectamente preparada para recibir nuestro tratamiento nocturno. Hay muchos tipos de desmaquillantes, para cada tipo de persona, sus necesidades o sus rutinas. Lo ideal sería realizar la doble limpieza de la que te hablo en este video y elegir los productos que mejor se adapten a ti.
A si que ya lo sabes, ¡¡ni una noche a dormir con el maquillaje puesto!! Tu piel lo agradecerá, y tú seguro que lo notas.